viernes, 26 de noviembre de 2010

Capilla presbiteriana abandonada en Buchanan

Escrito e ilustrado por Sergio “El Pampa” Zerega

Como suele ocurrir siempre, hay cosas interesantes que uno tiene al alcance de la mano y por tenerlas tan a mano no las termina conociendo. Sobre la Ruta Provincial 53 hay una capilla presbiterana que data de 1854: la Capilla de Saint John, conocida como la “Capilla de los Escoceses”. Pasé mil veces por delante del cartel y siempre dije: la próxima vez paso a conocerla… Pero llegué tarde: días atrás, en el diario local leí que se había incendiado.

Antes que la demuelan o algo así, fuimos a verla y nos encontramos con un lugar sorprendente, parecido al Templo de la Perdición de Indiana Jones.

En un bosquecito bien agreste, en medio de una propiedad privada donde efectúan sembradíos, se encuentra esta maravilla de 1854, lamentablemente muy quemada por el incendio, aunque antes del mismo tampoco recibía mucha atención pese a que se dice que fue declarada “Monumento Histórico Provincial” desde hace bastante tiempo, como indica el cartel.


© 2010, Sergio Zerega

Para ampliar sobre este tema y ver más imágenes:

viernes, 19 de noviembre de 2010

Muro abandonado en Mulcahy

Más bien diremos: inconcluso y abandonado. Se trata del apoyo de mampostería para un puente que nunca terminó de hacerse.

En los alrededores de Mulcahy (partido de 9 de Julio) se cruzaban a nivel dos vías férreas: el Ferrocarril Provincial de Buenos Aires y la Compañía General de Ferrocarriles. Esta última tenía a pocos metros un embarcadero, denominado “Kilómetro 253”, del cual no ha quedado absolutamente nada. Ambas líneas de trocha angosta existían desde los años ’10 y eran, por supuesto, empresas diferentes; décadas más tarde quedaron unificadas bajo la administración del Ferrocarril General Belgrano y, tardíamente, se decidió eliminar este cruce a nivel y construir un puente.

Jamás fue concluido, porque pronto llegó la orden de clausura para el ex Ferrocarril Provincial (el que debía pasar “por arriba”) y luego sobrevino el levantamiento de sus rieles. Con el tiempo también el ex Compañía General fue clausurado y levantado, y en el lugar donde antes se cruzaban dos ferrocarriles hoy solo queda el cruce de dos caminos de tierra y un puente a medio hacer.



© 2010, Héctor Ángel Benedetti

jueves, 4 de noviembre de 2010

Locomotora abandonada en Hinojo

Sobre el desvío ferroviario de Hinojo a Sierra Chica, partido de Olavarría, quedó abandonada la locomotora que muestran las tres últimas fotografías. Era la nº 7083 del FCGR. Poco a poco se la fue vaciando, hasta quedar prácticamente irrecuperable.



© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 29 de octubre de 2010

Faro abandonado en Miramar

Escrito e ilustrado por Fernando Marietán para La Periferia de Angkor

En el extremo sur de la bahía de Miramar, en el accidente geográfico denominado Punta Hermengo (se dice que originalmente fue llamado Punta San Hermenegildo; los años y los cartógrafos colaboraron para su denominación actual), se encuentran los restos de un viejo faro.

Su construcción data de 1915 y con el correr de los años fue sufriendo varias alteraciones. Quedó desafectado en la década del ’80, tras la instalación del Faro Miramar en la azotea del edificio Playa Club. Su estructura troncopiramidal hoy muestra un deterioro avanzado.

En el museo Punta Hermengo se conserva su lámpara original.


© 2010, Fernando Marietán

viernes, 22 de octubre de 2010

Club abandonado en Araujo

Araujo es un pequeño caserío del partido de 25 de Mayo. Lleva este nombre en memoria de José Joaquín Araujo (1762-1835), doctor en filosofía, periodista en los años previos a la Revolución de Mayo desde las páginas del Telégrafo Mercantil (el primer periódico argentino), funcionario público y temprano compilador de datos y documentos históricos.

En Araujo existió, frente a la estación del Ferrocarril Midland de Buenos Aires, un club donado por la propietaria de unos campos de la zona. Fue bautizado “Independiente” y funcionó hasta que un tornado castigó duramente a la localidad y dejó a esta gran construcción en muy mal estado.

Sus paredes hoy sobreviven apuntaladas. Nunca se lo reconstruyó.


© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 15 de octubre de 2010

Cementerio abandonado en Giles (parte II)

Más imágenes del Cementerio Sud de San Andrés de Giles, abandonado a finales del siglo XIX. En el pequeño predio que ocupa aún pueden observarse mausoleos vacíos, monumentos funerarios y placas recordatorias de la tragedia que fuera causa de su fundación.


© 2010, Héctor Ángel Benedetti

sábado, 9 de octubre de 2010

Cementerio abandonado en Giles (parte I)

Debido a dos epidemias consecutivas que sufriera el pueblo de San Andrés de Giles (una de fiebre amarilla en 1869 y otra de cólera en 1871) el cementerio local colapsó y fue necesario habilitar en sus afueras, en lo que actualmente es una zona de chacras frente al Club de Planeadores, uno nuevo: el Cementerio Sud. En realidad fue el tercer camposanto que hubo en estos pagos.

Sus obras finalizaron en 1873, pero estuvo funcionando por poco tiempo. Apenas unos años después se inauguró el cementerio definitivo, ubicado en otra parte. Y el del Sud quedó abandonado.


© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 1 de octubre de 2010

Proveeduría abandonada en Corbett (parte II)

Otras cuatro imágenes del llamativo edificio frente a la estación Corbett del Ferrocarril Midland de Buenos Aires. La primera corresponde al frente; luego, su parte trasera; y las dos fotografías restantes muestran algo de su interior: el sector de la cocina (con escalera hacia el piso superior) y una salita de juegos.



© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 24 de septiembre de 2010

Proveeduría abandonada en Corbett (parte I)

Los Corbett tenían una estancia en el partido de 9 de Julio, dotada con importantes instalaciones: un casco de gran magnitud, varios puestos construidos en estilo inglés, escuela para los hijos de los peones, desvío ferroviario propio (que acercaba a la familia propietaria hasta la casa principal), y una singular y enorme proveeduría frente a la estación.

Esta proveeduría de elegante arquitectura en realidad cumplió varias funciones. Fue almacén de ramos generales y sitio de esparcimiento, brindó alojamiento a los viajantes y también sirvió como estafeta postal. Algunos lugareños informaron que era conocido como “La Fonda” y evocaron sus tiempos de esplendor.

Si bien algunos detalles del frente hoy denotan que alguna vez intentó restaurárselo, desde hace muchos años se encuentra abandonado.


© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 17 de septiembre de 2010

Almacén abandonado en San Fermín

Entre las pocas construcciones que pueden observarse en San Fermín (partido de Guaminí) figura esta: un almacén cerrado hace largo tiempo. Servía como referencia, pues estaba marcado en las cartas topográficas. De él salía una huella hacia la estancia La Rosa. Su frente era sencillo; la parte trasera, en cambio, tenía más encanto.




© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 10 de septiembre de 2010

Esquina abandonada en Ordoqui

Pueblo del partido de Carlos Casares, sobre la traza del Ferrocarril Midland; más o menos a diez kilómetros del límite con el partido de 9 de Julio.

Una esquina que supo ser boliche, típica de lugares como este, a duras penas sobrevive tras largos años de abandono. Parece salida de una pintura de Jorge Frasca.

Parte de su techo se derrumbó.




© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 3 de septiembre de 2010

Casa abandonada en Hortensia

Hortensia es un pueblo en el partido de Carlos Casares. Debe su nombre a la propietaria de los campos de esta zona: Hortensia A. de Ceballos.

Sobre la calle que lleva hasta un caserío próximo —Ordoqui, a nueve kilómetros— hay una vivienda abandonada, que otrora también funcionó como comercio.


© 2010, Héctor Ángel Benedetti

viernes, 27 de agosto de 2010

Hotel abandonado en Comodoro Py

Es un pueblo chico en el partido de Bragado. Viven en él menos de 700 vecinos, en manzanas que rodean a una placita al sudeste de la vía férrea clausurada. Comodoro Py fue uno de los tantos lugares agropecuarios que crecieron a la par del tren. El primero corrió por aquí en 1911.

En una esquina, sobre el camino que lleva al Desvío Kilómetro 234, quedan restos de un viejo hotel. De aquellos hoteles que recibían viajantes de comercio, acopiadores de cereal, comisionistas en tránsito hacia otras localidades, o un grupo de artistas modestos luego de ofrecer una función en el club.

Sobre la puerta todavía resiste el cartel.



© 2010, Héctor Ángel Benedetti